Fuente: Economía y Negocios – El Mercurio

Eran las 12:00 horas cuando una detonaciA?n de 400 kilos de explosivos -que demolerA�a un edificio de 10 pisos- hizo vibrar fuertemente la tierra en la mina Chuquicamata: una vez que se despejA? la polvareda levantada por el estallido, los tA�cnicos de Codelco vieron que finalmente habA�an unido el futuro proyecto subterrA?neo con la superficie.

AsA� concluA�a ayer la obra gruesa del túnel de 7.500 metros -de 9,3 m de ancho y de 5,8 m de altura- que da acceso al yacimiento bajo tierra, el que reemplazarA? las operaciones a rajo abierto.

La construcción del túnel comenzA? en junio de 2012. Entonces, un equipo de trabajadores empezA? a perforar desde la superficie. Un año despuA�s, una segunda cuadrilla iniciA? una excavaciA?n desde la Rampa 1, en la actual mina.

Ayer, tras la detonaciA?n, y un emocionado “ceacheA�” de algunos de los 600 operarios que participaron en la faena, se conectA? la labor de ambas unidades. Luego, un grito de “grande minero”, que venA�a desde la superficie y resonA? en lo profundo, dio un primer indicio de que todo habA�a funcionado, lo que posteriormente fue corroborado por personal de geomecA?nica.

Para el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, el túnel es “un primer hito relevante en la materializaciA?n del proyecto Chuquicamata subterrA?nea. Este nos permitirA? avanzar en los próximos megacontratos, que posibilitarA?n iniciar la producciA?n a fines de 2018 o principios de 2019”.

El jefe de construcción de la obra, Ignacio Vera, agregA? que “nos permitirA? mejorar la conectividad, tanto para entradas y salidas del personal, como tambiA�n para el ingreso de insumos, suministros y equipos a los desarrollos subterráneos, evitando las interferencias y logA�sticas adicionales para acceder a travA�s del rajo Chuquicamata, como se realiza actualmente”.

En los próximos días terminarA? la pavimentaciA?n del túnel y se instalarA?n las redes de servicio y ventiladores definitivos.